Parque Grande José Antonio Labordeta, Zaragoza
Durante cinco fines de semana del mes de mayo, Mario Molins llevará a cabo la talla directa de una escultura, de unos ocho metros de altura, en un ciprés portugués que se ha secado en la rosaleda del Parque José Antonio Labordeta. Se llamará “Catharsis”. Allí hablará la naturaleza y el artista. Pero hay más diálogos. Molins ha tomado la parte superior de aquel ciprés y ha esculpido otra Catharsis que está en esta exposición. Las dos “Catharsis” tienen unos brotes de bronce dorado, que son fundiciones directas de ramas de aquel ciprés que perdió la vida y la savia que nutrió aquel árbol. Molins ha logrado, con su actuación artística, una metáfora de la vida, de la germinación, de la semilla, de la nueva savia del arte. Más diálogos es imposible de lograr y de ver en esta catharsis.
Ricardo García Prats
Comisario de la exposición
Director del Museo Salvador Victoria
19 mayo, 2016
Escultura, Escultura pública, Intervención In-situ, Madera